Pan rústico con un ligero sabor dulce y delicado, ya que ninguno de los ingredientes sobresale disminuyendo al otro. Pan sano y saludable, con mucho aporte de fibras.
Cantidad: 12 flautas medianas
INGREDIENTES
✔ 100 gramos de salvado de trigo
✔ 1 taza de agua caliente
✔ 60 gramos de levadura fresca o 2 cucharadas de levadura seca
✔ 1 taza de azúcar (200gramos)
✔ 410 gramos de puré de zapallo o calabaza
✔ 200 gramos de almendras
✔ ½ cucharada de sal
✔ 1 kg de harina 000 (3 ceros o la que se tenga disponible)
✔ 1 taza de aceite (250 cc)
✔ 1 taza de agua tibia (250 cc)
PREPARACIÓN
Poner en un recipiente el salvado.
Agregarle el agua caliente y mezclar hasta que el salvado se humedezca.
Una vez que el salvado está tibio, incorporarle la levadura desgranada y mezclar todo bien hasta aunar.
Añadir el puré de zapallo bien pisado, el azúcar y la sal.
Revolver bastante hasta unir estos ingredientes.
Incorporar 150gramos de almendras previamente algo procesadas para que al morder se encuentren los trozos.
Por último agregar la harina intercalando con la taza de agua tibia hasta formar una masa.
Al formar la masa tener en cuenta que la humedad del zapallo tiende a humedecer la masa.
Tornándose pegajosa.
Amasarla sobre la mesada ayudándose con un poco de harina hasta que quede menos pegajosa y bien formada la masa.
Colocarla en un recipiente grande, donde la masa pueda levar tranquila sin problema de espacio.
Para acelerar el proceso de levado se puede llevar al microondas y ponerla durante 1 minuto al 60% de potencia.
Este tiempo varía de acuerdo a cada microondas ya que todos son diferentes y lo que es normal para uno puede resultar excesivo para otro.
Se deja allí con la puerta cerrada hasta que duplique su volumen.
Luego se vuelca sobre la mesa previamente aceitada.
Conviene trabajar la masa con un poco de aceite para no continuar utilizando harina que podría endurecer la masa y cambiarle su textura.
Dividirla en varias partes.
Tomar una de ellas y estirarla de ambos extremos formando una especie de flauta (o baguette).
Acomodarlas sobre una placa, cubrirlas con un paño y colocarla sobre la cocina mientras precalentamos el horno ellas aprovechan a descansar y levar.
Precalentar el horno a una temperatura media de 180º y ponerlas en la parte media del horno.
Antes de cocinarlas pintarlas con huevo, espolvorearlas con azúcar y decorar con el ressto de las almendras.
Aproximadamente en 25 minutos están prontas.
Como es nuestra costumbre, les informamos que se pueden congelar guardándolas en caliente en una bolsa de nailon apta para freezer. Esperar hasta que estén tibias y recién ahí congelarlas.