Aprovechando un resto de guacamole hemos elaborado este «pan de guacamole», con sabores intensos, muy indicado para acompañar comidas suaves.
Cantidad: 10 panes de aproximadamente 300 gramos
INGREDIENTES
✔ 120 gramos de salvado de trigo
✔ 2 tazas de agua caliente
✔ 300 gramos de guacamole
✔ 1 cucharada de sal
✔ 2 cucharadas de azúcar
✔ 1 taza de semillas de lino dorado (150 gramos)
✔ 1 taza de aceite
✔ 100gramos de levadura fresca o 3 cucharadas de levadura seca
✔ 1 kg de harina 000 (o la que puedan conseguir)
PREPARACIÓN
Poner el salvado de trigo y las semillas de lino en un recipiente.
Cubrir con el agua caliente y dejar así 10 minutos o hasta que esté hidratado.
Agregarle el guacamole, la sal, el azúcar, el aceite y mezclar.
Añadir la levadura (en este caso se utiliza más cantidad de levadura ya que los ingredientes que lleva este pan son más pesado).
Mezclar la levadura con el resto de los ingredientes.
Ir agregándole de a poco la harina mientras se va revolviendo. De ser necesario se le agrega un poco más de agua tibia, para terminar de formar la masa.
Una vez que la masa se desprende de los bordes del recipiente, se vuelca la masa pegajosa sobre la mesa previamente enharinada.
Tener en cuenta que las masas de levadura son blandas.
Comenzar a amasar en forma continua siempre ayudándose con algo de harina, hasta que se convierte en una masa lisa, elástica, sedosa y ya no se pega ni en la mesada ni en las manos.
Una vez lograda esta textura, que aproximadamente puede llevarnos 10 minutos, formamos un bollo con ella y lo colocamos en un recipiente enharinado y lo suficientemente grande como para que la masa pueda expandirse y alcanzar durante su descanso el doble de su volumen.
Cubrimos el recipiente con nailon o papel film y lo colocamos fuera de corrientes de aire en un lugar cálido para que el levado se acelere.
Una vez que la masa duplicó su volumen al doble, la volcamos sobre la mesada y la amasamos un poco para quitarle todo el aire que acumuló y que retorne a su tamaño inicial.
Dividimos la masa en porciones de acuerdo a la forma que le queremos dar al pan de guacamole: panes chicos, panes trenzados, pan de molde, etc. En este caso se les dio forma de ocho, pero este pan de guacamole puede tener la forma que más te guste.
Se apoyaron sobre una placa de horno limpia. Se cubrieron con un paño y se dejaron en reposo hasta que levaron.
Cocinarlos en un horno precalentado, caliente a 200º durante 30 o 35 minutos o hasta que se noten cocidos.
Una vez tibios se pueden congelar guardados en bolsas de freezer de alta densidad, durante 3 meses.