Para acompañar un almuerzo o cena sustituyendo el pan común. Resulta un bocado exquisito además de nutritivo por el aporte de estas semillas además de su fibra.
INGREDIENTES
3 tazas de harina (360 gramos)
1 cucharadita de polvo de hornear (levadura química, leudante)
Sal a gusto
Pimienta recién molida a gusto
50 gramos de queso rallado de sabor fuerte
150 gramos de manteca fría (mantequilla) o manteca vegetal
Agua helada enfriada con cubos de hielo
Para pincelar y cubrir
Huevo batido
Semillas de sésamo (ajonjolí)
PREPARACION
Cernir la harina, el polvo de hornear, la sal y pimienta y ponerlos en un tazón.
Agregar la manteca cortada en cubitos e ir pisándola con un tenedor hasta que quede una mezcla granulada.
Incorporar de a poco el agua helada mientras se va revolviendo con pala de madera evitando tocarla con las manos para no trasmitirle calor.
Una vez que la masa tomó la consistencia necesaria se vuelca sobre la mesa enharinada.
Se espolvorea la masa con un poco de harina y sin tocarla se empieza a estirar con el rodillo hasta que tenga unos 4mm de espesor.
Se corta con un cortante de la forma que más nos guste o también se puede emplear una ruedita lisa o dentada.
Se acomodan en placas limpias, se pintan con huevo batido y se cubre toda la superficie con semillas de sésamo.
Cocinarlas en horno precalentado moderado de 190º durante 8 o 10 minutos o hasta que estén cocidas y algo doradas.
Se pueden conservar en envases herméticos durante varios días.